Hace unas semanas se hablaba del corte de crudo iraní a España y cómo finalmente se hacía efectivo el cierre del grifo, cosa que se predecía fatal para la delicada situación actual española. Pues bien, después de varios días con una tensa calma respecto a la posible expropiación de YPF (filial argentina de Repsol) y las declaraciones efectuadas por parte de nuestro gobierno, finalmente ayer Lunes 16 de Abril se hacía efectiva esta acción por parte del gobierno argentino, con una expropiación de un 51% de la misma.
La situación que se plantea frente a este acto (no digo que sea una acción deslegítima) es cuanto menos para España un suma y sigue en la escalada de precios de los carburantes, ya de por sí bastante elevados. Se ha hablado que Repsol tenía mas de un 50% de dependencia del crudo suministrado por YPF, con lo que ahora esta situación, desde mi punto de vista personal, se transformará en una subida de precio en las gasolineras de una manera inminente, primero seguramente por dicha compañía, a la cual se sumará el resto posteriormente.
Esto me ha planteado una duda, que como muchos de los lectores, tendrán en mente cada vez que hacen la obligada visita a la gasolinera, ¿cuanto cuesta realmente un litro de gasolina o gasoil?
Precios base y precios mas impuestos
El gráfico no deja duda alguna en cuanto la composición de los precios, del total del precio, un 46’06% y un 40’84% son impuestos en la gasolina de 95 octanos y gasóleo A respectivamente. Analizando el gráfico se observa que el precio real sin impuestos sería de 0’658€/litro para la gasolina de 95 octanos y de 0’68€/litro para el gasoil A (para un precio medio de 1’461€/litro y 1’386€/litro para la gasolina de 95 octanos y gasoil A respectivamente)
Este gráfico me hace reflexionar el precio en conjunto de los hidrocarburos. Personalmente si lo veo así, tal cual, precio por litro, lo veo exageradamente caro. No entiendo como puede existir un porcentaje tan elevado de impuestos para un producto que podría llamarse esencial y de primera necesidad (aunque suene triste y extraño llamarlo así) Pero si se ve en conjunto el precio, pensando en lo que realmente es y los medios necesarios para su venta (extracción, refinado, transporte, distribución y la infraestructura necesaria para su posterior venta) la cosa cambia. No quiero decir con esta reflexión mía que el precio sea bajo (no lo diré muy alto por si acaso…) pero si que quizás hemos vivido sin darle la importancia necesaria a lo que es el petroleo, y que hemos agotado y exprimido a la gallina de los huevos de oro de nuestra sociedad.
Este caso y lo ocurrido estas semanas con los acontecimientos internacionales de Irán y Argentina ponen en evidencia algo que ya todos sabemos, la dependencia energética que tenemos respecto al crudo y hace que cada día mas (yo me incluyo) dejemos aparcado el coche en el garaje y tengamos que desplazarnos en el día a día mediante otros medios (véase, bicicleta) o aventurarnos a pagar el precio del oro negro.
En fín, de seguir así ya no tendremos excusa alguna para poder pasarnos finalmente al uso de un eléctrico o de algún vehiculo que no dependa directamente del uso de los hidrocarburos tradicionales, porque creo que el bolsillo de los ciudadanos ha llegado un punto de no retorno y de inflexión. O eso, o hacernos ciclistas, porque ¿quién dijo que las bicicletas eran sólo para el verano?