Paradójico: producir hidrógeno para hacer gasolina
Para que luego digamos que la industria petrolífera le tiene manía al hidrógeno.
Mientras algunos fabricantes de automóviles se quejan de la falta de hidrogeneras para que los coches de hidrógeno puedan remontar el vuelo, la empresa Air Products inaugura esta semana su enésima planta productora de hidrógeno cuya producción irá destinada, íntegramente, a abastecer una refinería de petróleo.
Es la planta de producción de hidrógeno más grande de Canadá, con un rendimiento de más de 100 millones de pies cúbicos standard (cerca de 3 millones de metros cúbicos) por día. Pero su producción no servirá para alimentar ni un solo coche propulsado por hidrógeno.
Es cierto que casi todo el hidrógeno que se produce en el mundo está destinado a la industria petrolífera. Tanto es así, que esta es la segunda de este tipo que se construye en la zona. Otra, algo más pequeña, se inauguró en junio de 2006.
El cliente principal será Petro-Canada, que se dedica a la extracción de arenas bituminosas en la región de Alberta para, con la ayuda inestimable de este gas tan "peligroso" para los intereses de la industria petrolera, obtener gasolina y gasóleo (135.000 barriles diarios en la refinería de Edmonton).
Con esta segunda planta se completa la conversión de la refinería de Edmonton, que de este modo podrá funcionar utilizando como única materia prima las arenas de alquitrán que se extraen en la zona.
Canadá, junto con Venezuela, posee las mayores reservas del planeta de arenas bituminosas. Estas arenas de alquitrán están formadas por arena, betún, agua y arcilla. Tras separar los componentes, el betún es reformado en petróleo que, con la ayuda del hidrógeno, se refina hasta obtener gasolina y gasóleo.
Nota: La foto pertenece a una planta de hidrógeno ubicada en Texas, USA. Todo el hidrógeno producido se emplea en el refinado de petróleo.